Científicos chinos y alemanes lograron hacer, por primera vez, un registro de la radiación proveniente de la Luna. Aunque esto representa un gran logro para los observatorios astronómicos, también mostró una preocupante realidad: tienen una tasa equivalente a 60 microsieverts por hora, el doble de la radiación que a la que estuvieron expuestos las personas evacuadas de Chernobyl.
Aunque evidentemente esto no tiene consecuencias sobre la vida en la Tierra, sí es una preocupación mayor para todas aquellas naciones que pretendan enviar misiones cercanas a la Luna para su exploración y estudio.
Robert Wimmer-Schweingruber, de la Universidad de Kiel, Alemania explicó que:
“Los humanos no estamos hechos para resistir la radiación espacial. Sin embargo, los astronautas pueden y deben protegerse lo más posible durante estancias más largas en la Luna, por ejemplo, cubriendo su hábitat con una gruesa capa de suelo lunar“
La radiación en el espacio a la que estarían expuestos los tripulantes de futuras misiones, ya sea a la Luna o rutas que sean similares, pueden ser medidas a través del sistema con el que se hizo esta investigación, permitiendo explorar los riesgos radioactivos para los humanos presentes.
Por supuesto, esto significa que la siguiente carrera espacial, ya comenzada, entre China, Estados Unidos, Rusia, India y hasta Elon Musk tendrá que pasar, primero que nada, por controles que permitan saber si su tripulación estará a salvo de los riesgos de la radiación espacial.
Sin esto, cualquier misión será contrario a toda la legislación que existe respecto a ello, en la que se prioriza, ante todo, la vida de las personas que harán el viaje, ya sea simplemente a la Estación Espacial Internacional, a la Luna, a Marte o a cualquier rincón que la exploración espacial quiera cubrir.
Recientemente, Estados Unidos aseguró que su segunda misión de exploración lunar está cerca de ser desarrollada. Sin embargo, este nuevo descubrimiento puede hacer más complicado todo.
(Con información de codigoespagueti)
