Un oficial que atendió el hecho aseguró que la bala perforó una pared y se alojó en la cabeza de la mujer. Desconsolado, el joven salió corriendo a la calle y se disparó.
En Oklahoma, Estados Unidos , un adolescente mató a su mamá y se quitó la vida. Las autoridades creen que el joven, de apenas 16 años, cometió el homicidio de manera accidental cuando estaba jugando con una pistola.
Se conoció que el joven disparó un proyectil que se alojó en la cabeza de su progenitora, que falleció de manera instantánea.
Bradley Rule contó a People que “la bala perforó la pared que separaba la sala de la cocina y le dio a la mujer en la cabeza. Ella cayó al piso y murió”.
El uniformado añadió que cuando el joven de 16 años vio la escena salió corriendo a la calle y se quitó la vida con esa misma pistola.
Un vecino, que escuchó los disparos, se encargó de dar aviso al 911.
Rule infirmó que cuando llegó al lugar de los hechos encontró al menor tirado y a su lado la pistola: “Fue terrible”.
Pese a que el joven que mató a su mamá fue llevado con signos vitales a un centro asistencial, falleció.